Política de cookies

Este sitio emplea cookies para prestar sus servicios, para personalizar anuncios y para analizar el tráfico. Google recibe información sobre tu uso de este sitio web. Si utilizas este sitio web, se sobreentiende que autorizas el uso de cookies.

Entendido. Estoy de
acuerdo.



miércoles, julio 22, 2009

GAMBAS AL AJILLO HECHAS EN MICROONDAS


Ingredientes: una docena de gambas grandes rojas frescas o descongeladas. Un poco de aceite para sofreir. Dos o tres dientes de ajo. Dos guindillas partidas. Perejil, en polvo, fresco, o congelado, da igual. Un limón para escurrir.


Forma de hacerlas: Primero se pelan las gambas en crudo. Luego se trocean en dos o tres trozos cada una de las gambas, dependiendo del tamaño.

Se machacan en un mortero, los tres dientes de ajo, junto con el perejil. Una vez machacados se les añade el aceite de oliva crudo, y se remueve en el mismo mortero con el ajo machacado y el perejil también machacado, o majados. Una vez que el aceite de oliva crudo, se mezcle bien con el majado de ajos y perejil, se coloca todo ello en una pequeña cazoleta baja de barro, se le ñaden dos guindillas picantes troceadas y se mete en el microondas a máxima potencia durante unos tres minutos, para que se sofría bien. Ojo, los trozos de gambas aún no se añaden. Pasados esos tres minutos se saca la cazoleta de barro, cuidando no quemarnos, utilizando unas manoplas de cocina. Se incorporan los trozos de gambas y se remueven metiéndolos en el microondas unos dos minutos más. Se sacan , se les echa un chorro de limón, y ya se pueden comer cuando se les pase un poco el calor de la cocción, para no quemarnos el paladar y poder de esta forma saborear un producto tan rico, rico. Para quien le guste, puede sopar o remojar con pan la salsa. Pero he de decir, que esta salsa, producto del aceite hervido junto al majado de ajos y perejil, no queda tan hecha como si lo subiésemos hecho en la sartén, por lo que estando buena, que lo está, no obstante resulta un poco empachosa, pues realmente el aceite en el microondas no llega a quemarse, sino que queda prácticamente crudo.